24.12.11

BOSQUE




Masticando el muérdago. El bosque, aquí,
millones de árboles que no tendrán nombre.
Penumbra poseedora de las almas.

Perdidos, arrastramos un halo de ruidos
que despiertan pájaros milenarios,
resbaladizos musgos heridos, plantas
suspirando la amenaza de un olvido
eterno; bosque dormido reflejándose
en el espejo de la tierra espesa:
raíces o rumor del secreto, abajo,
apelmazadas sin el amor del aire,
abajo, aquí, entre mis pies
y el centro del mundo: raíces
o el poder de la esencia retorcida
en un amasijo
de barros sin vida.

Plenitud del descanso. Aquí amanece.
Allí dentro las cortezas rugosas
recuerdan la vida de los tiernos tallos.
Salimos. Estamos en la frontera.
Atrás queda un rumor de vida sin nombre.


Olomouc. Diciembre 1990.

20.12.11

DESCENDENCIA




El niño, todavía ausente,

recuerda que va a ser padre

un día. Entonces llora semen,

porvenires, a moco tendido.



Ser padre o hijo,

es hereditario, eterno,

transferible, vitalicio,

prorrogable

y a renglón seguido.



La vida es crónica:

En cadena contamos acciones,

libros, hectáreas de versos

de secano o regadío, toneladas

de gametos en camino:
 
 
Ciegos. Lactancia siempre

latente en lo anciano y viva

en lo viejo, siempre succionando

la misma leche antigua y reciclada.



¿Para qué prolongar la saga

de inocentes desheredados?

Pregunta de siempre.

¿Para qué seguir dando

a luz dos pájaros de un tiro?



No vengas, hijo. Quédate

en la lista de espera acurrucado:

No trasciendas. Vence.

Hazte fuerte. Hazte luz cerrada

en el vientre suspendido:

Pues aquí sólo te aguarda

el dolor indolente de lo vivo;

la culpa en soledad

de haber nacido al presente;

niña o niño, hacedme sitio:

Refluyo, regreso, me rescindo.
 
 
Pragajoz, 13 marzo 2003

REYES MAGOS



Esta cabalgata

ha sido breve:

Pasaron los Reyes

Magos los niños

congelados, años,

sobre los hombros

de sus padres.



Y la vida sigue.



(Escucho un dime

para el que no tengo

versos.)

He visto tus labios

entreabiertos...



Y la duda sigue.

En su camello.

Calle abajo.


Pragajoz, 5 enero 2003